Defensor de los derechos humanos (DDH) es un término utilizado para describir a la persona que, individualmente o junto con otras, se esfuerza en promover o proteger esos derechos.1 Aunque el trabajo de los DDH emana directamente de los instrumentos internacionales de derechos humanos, el primer paso para el reconocimiento formal de la “defensa” de los derechos humanos como un derecho en sí mismo fue dado por la Asamblea General de Naciones Unidas en 1998, a través de la adopción de la Declaración sobre el derecho y el deber de los individuos, los grupos y las instituciones de promover y proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales universalmente reconocidos2 (conocida como la Declaración sobre los defensores de derechos humanos). Esta declaración contiene varias normas consagradas en tratados legalmente vinculantes, incluyendo el Pacto Internacional de derechos civiles y políticos (1966) y Derechos económicos sociales y culturales (1976).
Los DDH son un grupo bastante heterogéneo. De acuerdo con Hina Jilani, ex Representante Especial del Secretario General de la ONU sobre la situación de los Defensores de los Derechos Humanos, los DDH que trabajan en derechos sobre la tierra y recursos naturales son “el segundo grupo más vulnerable, porque corre el riesgo de perder la vida a causa de sus actividades de defensa de los derechos humanos,” (A/HRC/4/37). La relevancia de este grupo es confirmada por la actual Relatora Especial sobre la situación de los Defensores de los Derechos Humanos, Margaret Sekaggya, quien en 2011 les dedicó un informe sobre la base de 106 casos de supuestas violaciones ocurridas bajo su mandato entre 2006 y 2011 (A/HRC/19/55).
El papel desempeñado por los DDH en la gobernanza de la tierra se afirma en las Directrices Voluntarias sobre la Gobernanza Responsable de la Tenencia de la Tierra, la Pesca y los Bosques en el Contexto de la Seguridad Alimentaria Nacional, que afirman que “[…] los estados deberían respetar y proteger los derechos civiles y políticos de los defensores de los derechos humanos, en especial los derechos humanos de los campesinos, pueblos indígenas, pescadores, pastores y trabajadores rurales, y deberían observar sus obligaciones en materia de derechos humanos cuando traten con personas y asociaciones que actúen en defensa de la tierra, la pesca y los bosques.” (VGGT, 4.8)
La Coalición Internacional para el Acceso a la Tierra (ILC) con frecuencia recibe solicitudes de solidaridad de parte de miembros en África, Asia y América Latina para o en nombre de DDH que trabajan en derechos sobre la tierra, especialmente activistas. Esta nota informativa pretende apoyar su valiosísimo trabajo con información básica sobre los mecanismos internacionales de protección y organizaciones que se ocupan de las violaciones de derechos humanos relacionadas con la tierra.